
¿Entiendes o respondes?
Desde tiempo atrás, reflexiono y comparto, el beneficio de compartir lo que vivimos. Dichosas las personas que, como yo, contamos con seres queridos con quienes podemos compartirnos, sincerarnos y dejar ver nuestro lado más luminoso y nuestro lado torpe, como lo traducen los budistas. Nuestra luz y nuestra oscuridad, nuestro lado angelical y nuestros demonios que eventualmente vienen de visita. Saber que la sinceridad del momento no cambiará la percepción que se tiene de nosotros, al contrario, apreciarán nuestra basta humanidad.
Desde mi experiencia, compartir me ha resultado gratificante y amplía mi visión del momento, de lo vivo. Escuchar otras historias, otras experiencias y opiniones sobre un mismo suceso nos puede ayudar a valorar, resignificar o ver otras aristas de un mismo suceso o emoción hasta el momento imperceptible. Esta semana he vivido con tres mujeres cercanas este ejercicio de escuchar y ser escuchada. Somos encantadoras, las mujeres siempre tenemos tanto que compartir. Soy afortunada y querida, lo sé, lo siento y ellas también.
Es cierto que al compartir estamos aceptando el escuchar, el recibir, una retroalimentación, con madurez y respeto. Luego sucede que si no nos gusta lo que escuchamos, se fractura el vínculo. Entonces, si te sabes con una madurez frágil o un estado de ánimo vulnerable, mejor ni preguntes o advierte que no quieres comentarios, mantén a salvo tu relación.
Dado lo anterior, desde el mismo tiempo atrás he intentado como ejercicio personal la contención a mis comentarios. Reconozco que mi naturaleza es así, reactiva a veces, lo reconozco, en el sentido que escucho y ya estoy procesando, pensando, analizando y tengo ya algo que decir. Trabajo en ello, en preguntar “¿deseas saber mi opinión?”. No es sencillo, pero vale el acto. Con ello me he salvado de algunos conflictos.
“El peor problema de la comunicación es que no escuchamos para entender, sino que escuchamos para responder“. Alguna vez leí esta frase, a la fecha desconozco su autor. Me hizo pensar, observarme y me di cuenta de que deseaba modificar ese hábito. Sigo trabajando en ello. En tu vida,¿tu entiendes o respondes?
Foto: @beccatapert